El precio del mineral de hierro retrocedió el martes debido a que los inversores continuaron preocupados por las incertidumbres políticas en medio de la intervención del gobierno de China.
Según Fastmarkets MB, los finos de referencia 78% Fe importados al norte de China estaban cambiando de manos por $135.78 una tonelada durante el comercio de la mañana, un 1,4% menos que al cierre del lunes.
Los futuros de mineral de hierro más activos en la Bolsa de productos básicos de Dalian, para entrega en mayo, bajaron un 0,1% hasta 719 yuan ($108.04) por tonelada al cierre. Subieron hasta un 4,9% a 719 yuanes una tonelada antes durante la sesión.
“El mineral de hierro ahora está atrapado entre dos políticas opuestas en China”, dijo en una nota el analista de materias primas del Commonwealth Bank of Australia, Vivek Dhar.
“Los formuladores de políticas están dispuestos a limitar la inflación vinculada a los precios más altos del mineral de hierro. Su determinación de mantener bajo control los precios del mineral de hierro es particularmente fuerte dada su creencia de que están en juego fuerzas ajenas al mercado, como la especulación”.
Sin embargo, los márgenes en las acerías son decentes ya que las autoridades buscan impulsar el crecimiento económico, lo que está respaldando los precios del mineral de hierro, según la nota.
Los cuatro bancos más grandes del país redujeron el lunes las tasas hipotecarias en la ciudad de Guangzhou en 78 puntos básicos en un nuevo para apoyar al sector inmobiliario, según personas familiarizadas con el asunto.
Las ventas de viviendas en China han estado cayendo desde julio, exacerbando la escasez de efectivo entre los desarrolladores. Las ventas en las ciudades de primer nivel comenzaron a caer a fines del año pasado, según mostraron los datos de China Real Estate Information, luego de que los reguladores endurecieran las reglas de financiamiento para desactivar los riesgos.
Mientras tanto, el ministro de finanzas de China prometió implementar mayores recortes en impuestos y tarifas este año y fortalecer la coordinación entre la política fiscal y monetaria.
