El gobierno de Estados Unidos está adquiriendo una participación accionaria de 25 millones de dólares en la minera de metales para baterías TechMet, con sede en Dublín, como parte de un impulso del presidente Donald Trump para reducir la dependencia del país de las cadenas de suministro dominadas por China.
El respaldo de la Corporación Financiera Internacional para el Desarrollo (DFC) de US $ 60 mil millones ayudará a TechMet a desarrollar una mina de níquel y cobalto en Brasil. Ambos metales son clave en la producción de las baterías que alimentan los automóviles eléctricos y los teléfonos celulares.
Se estima que el proyecto de níquel brasileño de TechMet, en el estado nororiental de Piauí, contiene hasta 72 millones de toneladas de níquel y cobalto.
«Las inversiones en materiales críticos para la tecnología avanzada apoyan el desarrollo y promueven la política exterior de Estados Unidos», dijo Adam Boehler, director ejecutivo de la agencia gubernamental, en un comunicado.
La medida sigue a la orden ejecutiva de la semana pasada que declara un «estado de emergencia» en la industria minera de Estados Unidos. La directiva, que busca impulsar una industria local de metales para baterías, también solicitó un informe que evalúe posibles medidas como aranceles, cuotas u otras restricciones comerciales dirigidas a China y «otros adversarios extranjeros fuera del mercado».
Washington ha expresado su preocupación de que el control de China sobre el suministro de tierras raras pueda usarse como táctica contra las empresas estadounidenses que dependen de esos elementos.
China produce aproximadamente dos tercios de las baterías de iones de litio del mundo y ha tomado medidas para asegurar metales críticos para ellas, particularmente en África y América Latina.
Estados Unidos está tratando de contraatacar, y el Pentágono promete financiar la minería nacional de los materiales esenciales, mientras también invierte en proyectos en el extranjero.
Washington también ha creado el DFC para proporcionar una alternativa a las finanzas extranjeras chinas en Asia, África y América Latina.
El respaldo a TechMet marca la primera vez que el gobierno de Estados Unidos invierte directamente en una compañía de metales y minería, dijo el director ejecutivo de la compañía, Brian Menell.
TechMet fue fundada en 2017 por el veterano minero sudafricano Brian Menell, ex ejecutivo de Anglovaal and De Beers.
La empresa tiene una mina de estaño y tungsteno en Ruanda, una mina de tierras raras en Burundi y un proyecto de baterías de iones de litio en Canadá. También produce vanadio, un metal crucial para la fabricación de reactores nucleares y aviones militares.
Estados Unidos no está solo en su búsqueda por reducir la dependencia de los productores extranjeros. En septiembre, la Unión Europea intensificó sus esfuerzos para volverse menos dependiente de las materias primas importadas, incluidas las tierras raras y, por primera vez, el litio.