BHP (ASX, LON, NYSE: BHP) llegó a un acuerdo con trabajadores sindicalizados en su mina de cobre Escondida en Chile, la más grande del mundo, en un intento de última hora para evitar una huelga prevista para el 21 y 23 de noviembre.
El acuerdo con el Sindicato 1, que representa a más de 2.000 trabajadores, aún debe ser aprobado por los miembros del sindicato, que han sido llamados a votarlo el lunes.
BHP dijo que la propuesta describía la implementación de “una serie de medidas de productividad” que benefician a los trabajadores y a la empresa. La empresa dijo que el documento fue el resultado de un diálogo sostenido en las últimas semanas.
Los miembros del sindicato anunciaron la semana pasada que estaban listos para dejar de trabajar el 21 y 23 de noviembre debido a múltiples “incumplimiento, infracciones y violaciones” cometidos por BHP.
La minera más grande del mundo ha negó tales afirmacionesdiciendo que siempre ha operado la mina siguiendo los “más altos estándares de seguridad laboral y prevención de riesgos”.
Chile es el principal productor de cobre del mundo y las ventas del metal representan alrededor del 60% de sus ingresos por exportaciones.
Si el sindicato lo aprueba, el acuerdo aliviará las preocupaciones sobre una mayor restricción de los suministros globales del metal naranja, un material clave necesario para la transición mundial hacia una economía verde.
En 2017, los trabajadores de Escondida realizaron un paro de 44 días, el más largo en la historia de la minería chilena. La acción laboral le costó a la empresa $740 millones en pérdidas y significó una contracción de alrededor de 1,3% del PIB de Chile.
La operación, responsable de alrededor del 5% de la producción total de cobre del mundo, es de propiedad mayoritaria y está operada por BHP. Rio Tinto y compañías japonesas como Mitsubishi Corp también tienen participaciones en la mina.