En las sombrías profundidades de Apurímac, un desgarrador suceso ha estremecido la tierra: dos mineros artesanales atrapados en un abismo infernal tras deslizamientos provocados por implacables lluvias. La tragedia, que se desplegó en el distrito de El Oro, ha llevado a la región a un estado de emergencia, mientras la esperanza pende de un hilo.
El Ministerio de Energía y Minas (MINEM) ha emitido un sombrío informe sobre el dramático incidente, revelando que los mineros quedaron atrapados en un socavón mortal. En una respuesta urgente, la Dirección General de Formalización Minera (DGFM) del MINEM, en colaboración con la Dirección Regional de Energía y Minas (DREM) de Apurímac, ha movilizado esfuerzos para rescatar a los trabajadores atrapados.
La comunidad local, un bastión de solidaridad, se ha unido a las autoridades en un espectacular esfuerzo de rescate. En este momento crítico, la empatía y el coraje se entrelazan para desafiar a la tragedia. Además, el MINEM, consciente de la vulnerabilidad de las zonas mineras ante deslizamientos, ha capacitado a las direcciones y gerencias regionales de Energía y Minas en la identificación de riesgos, una iniciativa que se proyecta continuará en el año 2024.
Los mineros, identificados como Jesús Huamani Román (23) y Roger Ferro Quispe (20), han sido rescatados y llevados a Abancay para evaluaciones médicas. Este capítulo impactante, marcado por la lucha contra la naturaleza y la solidaridad, deja una huella imborrable en la región, recordándonos la fragilidad de la vida en la inclemente majestuosidad de Apurímac.