En un giro sorprendente, el precio del cobre se desliza un 0,3% a 8.846,50 dólares por tonelada métrica, marcando su punto más bajo desde el 13 de marzo, cuando tocó los 8.810 dólares. La Bolsa de Metales de Londres (LME) se estremece ante la debilidad del yuan chino y las crecientes inquietudes sobre la demanda de metales básicos.
A las 1500 GMT, el cobre a tres meses en la LME retrocede un 0,3%, situándose en 8.846,50 dólares por tonelada métrica, tras su descenso al nivel más bajo en semanas. Ole Hansen, jefe de estrategia de materias primas de Saxo Bank en Copenhague, plantea la incógnita crucial: ¿podrá el cobre consolidarse por encima del soporte clave de 8.770 dólares?
El mercado del cobre en la LME sufre un duro golpe tras alcanzar un pico de 9.164,50 dólares el 18 de marzo, seguido de un acuerdo inusual entre los fundidores de cobre chinos para reducir la producción. Mientras tanto, en la Bolsa de Futuros de Shanghai (SHFE), el contrato de cobre para entrega en mayo cae un 0,6% a 72.000 yuanes (9.973,40 dólares) por tonelada, tocando su nivel más bajo desde mediados de marzo.
La danza del yuan frente al dólar, impulsada por ajustes en la política monetaria china, agita los cimientos del mercado de metales. China, como principal consumidor y exportador de metales, ve debilitarse su poder adquisitivo en el comercio de materias primas cotizadas en dólares. Mientras tanto, el cobre enfrenta la presión de un aumento en las existencias de la LME, alcanzando niveles máximos desde febrero, lo que señala una oferta abundante a corto plazo en el horizonte.