En un movimiento que podría transformar el paisaje de la minería en Sudamérica, Aclara Resources ha anunciado su intención de iniciar la producción de tierras raras en Brasil para 2027, dos años antes de lo previsto. Con Brasil ostentando la tercera mayor reserva de estos preciosos minerales en el mundo, el país se está posicionando como un centro neurálgico para proyectos mineros innovadores en fase inicial. Aclara, en particular, está destacando por sus planes audaces para su yacimiento insignia de tierras raras en el estado de Goiás, que promete no solo ser rentable, sino también ecológicamente responsable.
El yacimiento Carina tiene el potencial de producir anualmente 191 toneladas de disprosio y terbio, tierras raras esenciales en la fabricación de vehículos eléctricos (VE). Este avance es crítico en un mundo que cada vez demanda más soluciones sostenibles y tecnologías limpias. Aclara ha actualizado su evaluación económica preliminar, fijando el valor actual neto del proyecto en 1.5 mil millones de dólares, con una impresionante tasa interna de retorno del 27% durante los 22 años de su vida útil. Estas cifras no solo resaltan la viabilidad del proyecto, sino que también posicionan a Aclara como un nuevo jugador clave en el mercado global de tierras raras.
Además, los costos de capital inicial se estiman en 593 millones de dólares, y los gastos de mantenimiento se proyectan bajos en 86 millones. Se prevé que el proyecto genere 505 millones de dólares en ingresos netos anuales y 366 millones de dólares en EBITDA, lo que significaría que, una vez en funcionamiento, Carina contribuiría con alrededor del 13% de la producción china de estos materiales críticos. Con tales cifras, el proyecto podría jugar un papel crucial en reducir la dependencia de las importaciones de tierras raras por parte de otros países.
Aclara Resources, acelerando el proceso con el apoyo de gobiernos locales, está en camino de revolucionar la industria mineras en Brasil. Su enfoque en la sostenibilidad, que minimiza el uso de explosivos y recicla el 95% del agua utilizada, refuerza su compromiso no solo con los beneficios económicos, sino también con la protección del medio ambiente. Con planes de realizar más estudios y perforaciones para avalar la construcción de una planta piloto, Aclara también está buscando la aprobación para un proyecto complementario en Chile. Sin duda, el futuro de la minería de tierras raras en Brasil es brillante y está a punto de despegar.