En un emocionante giro para la minería en Australia Occidental, AngloGold Ashanti y su socio Regis Resources han dado luz verde al ambicioso proyecto subterráneo La Habana. Este desarrollo promete no solo incrementar la producción de oro, sino también establecer un nuevo estándar en el aprovechamiento de recursos minerales. Se espera que, entre 2027 y 2029, la mina genere una producción superior a la proyectada en el plan minero actual de Tropicana, lo que augura un futuro brillante para ambos socios.
La mina de oro Tropicana, situada a 330 kilómetros de Kalgoorlie, se extiende a lo largo de 6 kilómetros y es capaz de albergar cuatro zonas mineralizadas. Bajo esta mina a cielo abierto, el depósito La Habana será el escenario del nuevo proyecto subterráneo, que se profundizará entre 500 y 700 metros por debajo de la superficie. La estratégica ubicación y la mineralización prometedora de La Habana elevan las expectativas sobre el potencial productivo de esta iniciativa, que busca un crecimiento sostenible a largo plazo.
Con una participación del 30% de Regis Resources en la empresa conjunta, y el 70% restante en manos de AngloGold Ashanti, la colaboración se fundamenta en un conocimiento compartido y en una visión común. La implementación del proyecto subterráneo La Habana se beneficiará de la infraestructura adecuada de Tropicana, lo que requerirá solo mejoras menores en energía, comunicaciones, ventilación y drenaje. La planificación anticipada en el uso de la planta de Tropicana, con una capacidad de aproximadamente 9,4 millones de toneladas anuales, garantiza un procesamiento eficiente del mineral extraído.
El CEO de Regis Resources, Jim Beyer, se muestra optimista sobre el futuro de este desarrollo, enfatizando que la aprobación del proyecto es un testimonio del potente crecimiento subterráneo en Tropicana. Con un historial de reemplazo constante de reservas, La Habana no solo representa una oportunidad inmediata, sino también la posibilidad de extender la vida de la mina a través de futuras exploraciones. Este enfoque en la minería subterránea no solo asegurará un aumento en la producción de oro, sino que también podría tener un impacto significativo en el valor de las operaciones a largo plazo.