La Compañía de Minas Buenaventura, a través de su filial Coimolache, está sentando las bases para un ambicioso proyecto en la mina de cobre Tantahuatay, ubicada en la provincia de Hualgayoc, Cajamarca. Durante la reciente feria Expomina Perú 2024, el gerente general de la minera, Leandro García, reveló que la operación en esta mina se extenderá hasta el año 2028, con la expectativa de iniciar una nueva etapa en la extracción de sulfuros que promete revolucionar la producción. Esta nueva mina tiene la capacidad de generar hasta 60,000 toneladas diarias, un número que sin duda impactará el mercado.
El yacimiento, que se encuentra debajo de la actual operación de óxidos de oro y plata, está en fase de perforación y presenta resultados alentadores que podrían permitir a Buenaventura sostener sus reservas por dos décadas más. García expresó su optimismo, afirmando que están ante un «yacimiento de clase mundial». Si los pronósticos se cumplen, esto no solo aseguraría la estabilidad de la operación, sino que también afianzaría la presencia de la empresa en Cajamarca, una región rica en recursos minerales.
A medida que continúa la evaluación de la viabilidad del negocio, Buenaventura se enfrenta a la decisión de si proceder con una operación subterránea o de tajo abierto. García mencionó que, si se opta por la minería subterránea, la vida útil inicial de la mina podría rondar los 15 años, pero si logran asegurarse más terrenos, la duración de la explotación podría ampliarse. Esta flexibilidad en el enfoque puede ser la clave para maximizar el potencial del yacimiento a largo plazo.
La inversión estimada para el desarrollo del proyecto Tantahuatay oscila entre US$600 y US$700 millones, lo que demuestra el compromiso de Buenaventura en seguir adelante con su agenda de expansión en la región. La compañía no solo apuesta por la explotación de un recurso mineral valioso, sino que también contribuirá al crecimiento económico de Cajamarca, garantizando empleo y desarrollo sostenible. La espera por la próxima fase en Tantahuatay se presenta emocionante, y los ojos del sector minero están puestos en cómo se desarrollará esta iniciativa en los próximos años.