Southern Copper Corporation ha hecho una declaración contundente sobre su rendimiento en el tercer trimestre de 2024, marcando un crecimiento del 18% en su producción de cobre en Perú respecto al trimestre anterior, alcanzando un total de 252,219 toneladas. Este aumento se ha visto impulsado no solo por mayores leyes de mineral, sino también por mejores recuperaciones en las operaciones de tajo abierto de la empresa. El presidente del directorio, Germán Larrea, destacó que este incremento es parte de un resultado positivo en todas sus operaciones, con un aumento general del 11.5% en comparación con el mismo período del año pasado.
Además de su sólida producción de cobre, Southern Copper también reportó importantes incrementos en la producción de sus subproductos. La producción de zinc experimentó un asombroso aumento del 90.9%, gracias a la concentradora de Buenavista, mientras que la producción de plata subió un 21.5%. En términos anuales, los incrementos en la producción de zinc, plata y molibdeno fueron igualmente destacados, reflejando un performance robusto en todas las líneas de productos. Estos resultados no solo demuestran la eficiencia operativa de la empresa, sino que también resaltan su capacidad para aprovechar el entorno de precios favorables en los metales.
Las ventas netas de Southern Copper en el tercer trimestre alcanzaron los $2,930.9 millones, un aumento del 17% en comparación con el año anterior, impulsadas por el crecimiento en los volúmenes de ventas de todos sus productos. En particular, el molibdeno, zinc y plata tuvieron un rendimiento sobresaliente, con incrementos de, respectivamente, 5.7%, 50.1% y 19.0%. Larrea atribuyó este éxito no solo a los mayores volúmenes, sino también a los precios más altos de los metales, lo que permitió a la empresa mantener uno de los costos en efectivo más bajos de la industria, marcando $0.86 por libra de cobre.
En un marco más amplio, el presidente de Southern Copper destacó la importancia de seguir una estrategia de crecimiento orgánico y sostenible, enfatizando el compromiso de la compañía con prácticas de producción responsable. La reciente certificación de sus operaciones peruanas bajo los estándares «The Copper Mark» y «The Molybdenum Mark» subraya este enfoque, garantizando que la producción cumpla con criterios ambientales, sociales y de gobernanza (ESG). Larrea también se mostró optimista sobre el mercado del cobre, anticipando que la demanda seguirá creciendo a medida que el metal se convierta en un pilar fundamental en la transición hacia energías limpias y tecnologías emergentes.