México: Industria minera sería una cura para la economía

La inversión global en la minería en 2020 se redujo casi un 50% con respecto a las estimaciones previas a la crisis sanitaria, pasando de unos 4.500 millones de dólares a menos de 2.500 millones, según Fernando Alanís, presidente de la Cámara Minera de México (Camimex). Sin embargo, la industria minera mexicana está lista para dar un repunte este año: varias empresas han anunciado que incrementarán la inversión en ciertos proyectos. Cómo la inversión retoma el impulso Así, la canadiense Torex Gold planea gastar entre 195 y 235 millones de dólares en sus operaciones en México. Está inversión estará por encima de los desembolsos estimados el año pasado en 175 millones de dólares, apunta Oxford Business Group.

A su vez, la minera estadounidense Newmont anunció haber preparado un presupuesto de 155 millones de dólares para la mina Peñasquito, que produce oro, plata, plomo y zinc. Si sigue su plan, su inversión en este proyecto aumentará en 69 millones de dólares respecto a la que ha hecho durante los primeros tres trimestres del 2020.Por su parte, la canadiense Almos Gold tiene previsto invertir en la mina Mulatos, situada en el estado de Sonora, entre 125 y 135 millones de dólares, lo que supondría una subida de entre 212% y 237% respecto a la inversión previa de 40 millones de dólares. Además, anunció sus planes de invertir en la mina La Colorada.

Además de las inversiones, las empresas del sector han aumentado la producción. Así, la estadounidense Golden Minerals, cuyo negocio está centrado en América Latina, anunció haber extraído en febrero el primer lote de oro de la mina Rodeo, situada en el estado mexicano de Durango.El aumento de la inversión en la minería podría ayudar a impulsar la recuperación económica de México, que en 2020 se contrajo un 9%, según el Fondo Monetario Internacional (FMI). México fue uno de los países más afectados por el COVID-19.

El FMI espera que en 2021 el PIB mexicano muestre un crecimiento del 3,5%. Sin embargo, mucho dependerá de cómo se comporten las industrias clave del país y la minera es una de ellas. Antes de la pandemia, México era el mayor productor mundial de plata y el noveno fabricante más grande de oro. El sector se atribuía casi el 4% del PIB del país, además de ser el sexto mayor generador de divisas extranjeras y proporcionaba 2 millones de empleos indirectos.Los precios favorecen la puja por una mayor exploración de los metales preciosos.

El aumento de la inversión en las minas de oro y plata podría ser un buen augurio para México, consideran los analistas de Oxford Business Group. El valor de ambos metales ha registrado un repunte en los últimos meses. El 3 de enero la plata aumentó un 161% en términos anuales hasta situarse en 28,52 dólares por onza. Fue el máximo de los últimos ochos años. En cuanto al oro, este metal batió su récord en julio de 2020 al subir hasta 2.036 dólares por onza.Este aumento de los precios de los metales preciosos es uno de los factores que han empujado el crecimiento de las inversiones. Como resultado de la pandemia que frenó las nuevas licitaciones, ahora las empresas mineras necesitan producir más con las inversiones existentes.

Esto, a su vez, «requiere que los equipos sean más eficientes y tengan ciclos de vida más largos», explicó Amilcar Rosas Orozco, gerente de ventas de la empresa mexicana Danfoss. Además, también se observan indicios de que la demanda de algunos de los minerales clave de México seguirá siendo fuerte en el futuro, destaca Oxford Business Group. Históricamente, el desarrollo de la joyería ha generado la mayor parte de la demanda de la plata. Sin embargo, el uso de este metal precioso cada vez mayor en [la producción de] los paneles solares, los nuevos coches y la electrificación «ha dado lugar a importantes perspectivas de crecimiento» en su minería, concluyó Mitchell Krebs, director general de la estadounidense Coeur Mining, citado por el ente.

La industria minera de México se vio fuertemente afectada en 2020 por la pandemia. La implementación de la mayoría de los proyectos se suspendió durante varios meses. Ahora, el sector reanuda poco a poco su actividad y las tiene todas para convertirse en el principal motor de la recuperación económica de México.