En diálogo con Valora Analitik, Juan Camilo Nariño, presidente de la Asociación Colombiana de Minería (ACM), abordó la actualidad del sector en el país, el cual inicia un 2021 con bastantes expectativas tras vivir un año con altibajos en minerales estratégicos para el país como carbón u oro, entre otros. Nariño explicó que en Colombia se presentó de manera consolidada una histórica caída del 26% del PIB minero en 2020, influenciado en gran medida por la reducción en la producción de carbón, ya que se pasó de 80 a 50 millones de toneladas de carbón (caída del 40%), una cifra de la ACM con base en los reportes de las empresas del sector.
Además, los minerales no metálicos tuvieron una contracción del 30% por cuenta de la caída de la construcción en el país, la cual se acentuó, sobre todo, en el primer semestre del año pasado. En contraparte, la minería metálica subió 22%, lo cual fue un punto favorable en medio de la coyuntura, explicó Juan Sebastián Martínez, director económico de la ACM.
Bajo este precedente, en 2021, la expectativa es al alza pues según Martínez, “tocamos fondo por cuenta del carbón”. Además, con base en las estimaciones al alza del sector construcción (10%) que ha señalado Camacol gracias a nuevos proyectos, el panorama es más favorable.
Panorama para el carbón
La producción de carbón podría establecerse entre 60 y 65 millones de toneladas en 2021 y el PIB minero en Colombia estaría creciendo a dos dígitos, en torno al 20%, algo que también se verá favorecido por la minería metálica con la entrada en operación de proyectos como Zijin-Continental en Antioquia.
“No vamos a volver a los 80, pero sí vamos a rebotar un poco este año pues será relativamente bueno frente al anterior, pero todavía con un potencial gigante en cuanto a producción de carbón y desarrollo de otros proyectos”, destacó Martínez.
Esto teniendo en cuenta incluso el impacto de la salida de operaciones mineras de Prodeco para Colombia, que producía hasta 18 millones de toneladas de carbón en sus minas de Cesar y reunía el 21% del total de las exportaciones del país.
Bajo la visión de Nariño, “ese activo productivo es de todos los colombianos, entonces la Nación lo que debería buscar rápidamente es tener un plan claro con tiempos establecidos de qué va a suceder con ese activo. Si va a abrir una licitación, si va a entregar la concesión, si va haber una ronda de negocios y eso en qué tiempos se va hacer. Lo más importante es un plan para que ese activo productivo siga generando divisas, exportando y dando regalías”.
No obstante, la ACM no conoce aún el plan para ello, pero el Gobierno sí está trabajando en eso, indicó el presidente del gremio.
A pesar de este panorama y el vacío que deja momentáneamente la salida de Prodeco, en Colombia hay potencial para llegar a entre 80 o 90 millones de toneladas en cuatro o cinco años con los proyectos actuales, en los cuales siguen destacando jugadores como Cerrejón con Arroyo Bruno, o Drummond. No obstante, no se ve claramente que haya nuevos proyectos de carbón en el país, indicó Martínez.
No obstante, Europa, el histórico comprador de Colombia, ha dejado de demandar carbón en márgenes del pasado, pero en Asia se trabaja en nuevas tecnologías para seguir usando carbón para producir energía en el futuro. A 2050, se estima que aún el 25% de la generación en el mundo se dé con carbón.
“Japón, China, Vietman, Bangladesh o Filipinas construyen nuevas termoeléctricas a base de carbón”, indicó Nariño, respecto a que aún habrá potencial para esta industria a pesar de temas como la reducción que se promueve en varios países.
Esto se soporta en que es poco realista la política de dejar de producir energía a base de carbón, tomando en cuenta efectos como las nevadas en Europa o EE. UU. que tienen bloqueados los paneles solares en muchas partes del mundo.
En Colombia, no obstante, según Nariño, hace falta construcción de política de Estado ya que han aumentado limitaciones por cuenta de fallos judiciales, asociaciones ambientales o sindicatos que limitan el desarrollo de proyectos mineros en el país. Debemos construir un Conpes de la competitividad del carbón colombiano, una política clara de qué vamos a hacer con el carbón colombiano, si se va a sacar o no y cómo vamos a competir… Si no construimos una política de Estado va a ser muy difícil mantener esa riqueza que tenemos”.
Esto incide, además de esos limitantes, en temas como la competitividad del carbón colombiano, que afecta el cómo competir para llegar a más mercados, cómo ser más competitivos o el índice de tasas con el que se tasan las regalías que sigue siendo europeo, pero solo el 10 % de las exportaciones va hacia países de ese continente.
Oro y cobre en Colombia
En otros minerales, la ACM prevé crecimiento en el mercado de oro por proyectos como Gramalote, las ampliaciones de Caldas Gold, Zijin o Quebradona en Jericó.
Además, países de la región como Chile, Ecuador o Perú son muy fuertes en cobre y no es lógico que en Colombia no haya. De hecho, explicó Nariño, Panamá tiene una mina nueva que contará con una inversión de US$6.000 millones.
“Colombia tiene potencial y certeza geológica en cobre de altísimo valor sin explorar, pero se deben dar fases de exploración e inversión… Sin exploración no hay balance ni diversificación de la minería nacional”, agregó el dirigente.
Para ello, se esperan proyectos de cobre en licenciamiento subterráneo como Jericó (Antioquia) de AngloGold Ashanti y otros cuatro en distintas fases de desarrollo, pero se necesita que el Ministerio de Ambiente avance en trámites y que la Autoridad Nacional de Licencias Ambientales (Anla) otorgue las licencias.
En Jericó, se estima se pueda producir hasta 70.000 toneladas de material de cobre al año, lo que sería estratégico pues actualmente el país solo produce 10.000 al año. Así se multiplicaría por siete la producción actual.
Más datos mineros
Según las cifras oficiales más recientes, el sector minero atrajo US$1.800 millones en inversión extranjera (12% del total nacional), exportó US$10.400 millones (27% del total nacional) y aportó una cifra récord de $2,5 billones en regalías. Además, según cálculos de la ACM, la inversión social y ambiental del sector en 2018 ascendió a $500.000 millones y realizó más de $13 billones en compras en el 2018, el 71% de ellas en el territorio nacional.
De esta forma, según el censo poblacional del Dane, en los últimos 25 años los niveles de Necesidades Básicas Insatisfechas (NBI) en los municipios mineros, territorio en donde el 79% de la economía depende de la minería, se han reducido de 61% a 33%.
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