Especialistas de la Universidad Nacional de Juliaca (UNJ) desarrollan una investigación que consiste en la aplicación de tecnologías de energía renovable a la red eléctrica que permitirán mejorar las condiciones extremas y la calidad de vida de los pobladores que viven en las zonas sobre 3,800 metros sobre el nivel del mar de la región Puno.
Así lo informó el Consejo Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación Tecnológica (Concytec) que precisó que los sistemas fotovoltaicos conectados a la red eléctrica, son instalaciones de generación distribuida, en la que intervienen tres elementos: los paneles fotovoltaicos, el inversor y la línea eléctrica de la red.
Destacó que el uso de estos sistemas contribuye a la mitigación del cambio climático y la reducción de gases de efecto invernadero (GEI), cuyos resultados son de gran crecimiento en varios países con climas muy variados y extremos.
El proyecto de la Universidad Nacional de Juliaca afirma que la generación distribuida con sistemas fotovoltaicos conectados a la red eléctrica ocupa cada vez más espacio en las discusiones sobre la inserción de las energías renovables en la matriz eléctrica del Perú.
Agrega que el uso de estos sistemas registra experiencias de gran crecimiento en varios países con climas muy variados y extremos. «Este crecimiento permitió una reducción significativa en el costo de producción de la energía eléctrica originado por la generación fotovoltaica, lo que convierte a la generación distribuida con pequeños sistemas fotovoltaicos en una alternativa energética competitiva, confiable y segura para el proveer de energía eléctrica no solamente en localidades aisladas y dispersas de la red eléctrica convencional», subrayó.
La investigación que desarrollan los especialistas de la UNJ propone, a través de los denominados Sistemas Fotovoltaicos Conectados a la Red Eléctrica (SFCR), tres estudios que se enfocarán en las condiciones extremas que tiene el altiplano peruano (altas y muy bajas temperaturas, radiación extrema, lluvia, polvo, granizadas, nevadas y otros).
Dichas topologías son: el inversor de cadena, conversores CC/CC y micro-inversores, lo que va a permitir el acondicionamiento de potencia, esto visto como una alternativa energética competitiva, confiable y segura para proveer de energía eléctrica no solamente en localidades aisladas y dispersas de la red eléctrica convencional, sino también para las regiones urbanas.
“Nuestro proyecto es de especial importancia, puesto que, al finalizar el mismo, se obtendrá información validada científicamente sobre el uso de diferentes topologías de generación fotovoltaica para las diferentes condiciones del Altiplano en distintas épocas del año, donde se tenga la óptima combinación de parámetros que permitan maximizar la generación de energía”, afirmó Norman Jesús Beltrán Castañón, investigador principal del proyecto.
Sostuvo que esta iniciativa se centra en la zona del Altiplano ya que tiene un componente social, debido a que todo el territorio posee condiciones similares. En un área de 100,000 kilómetros cuadrados, viven aproximadamente 5 millones de personas (entre Perú, Bolivia, Chile y Argentina), lo cual hará posible brindar las herramientas base para definir políticas de masificación del uso de la tecnología solar FV a través de una generación correctamente distribuida.
“Actualmente con el equipo de investigación nos encontramos en la fase de configuración del sistema, así como las pruebas para la puesta en operación”, aseveró.
Para la ejecución de este proyecto los investigadores de la Universidad Nacional de Juliaca recibieron financiamiento del Fondo Nacional de Desarrollo Científico, Tecnológico y de Innovación Tecnológica (Fondecyt) del Concytec, en convenio con el Banco Mundial.