AngloGold Ashanti, junto a su socio empresarial Regis Resources, ha dado luz verde al desarrollo del ambicioso proyecto subterráneo La Habana, ubicado en Australia Occidental. Este nuevo proyecto se espera que impulse la producción de oro por encima de las proyecciones anteriores del plan minero existente de Tropicana, entre los años 2027 y 2029. Con una estrategia centrada en la minería subterránea, La Habana promete revolucionar la dinámica de la productiva mina de oro Tropicana, ubicada a 330 kilómetros de Kalgoorlie.
El yacimiento de Tropicana se extiende a lo largo de seis kilómetros e incluye cuatro zonas mineralizadas, con el depósito La Habana como foco principal del desarrollo. La peculiaridad de este proyecto radica en que se construirá una mina subterránea debajo de la explotación a cielo abierto existente, una técnica que permite maximizar la recuperación del mineral a profundidades de entre 500 y 700 metros por debajo de la superficie. Gracias a su infraestructura ya establecida, el proyecto requerirá solo ajustes menores para asegurar la energía, comunicación, ventilación y desagüe.
Jim Beyer, director general y CEO de Regis Resources, destacó la importancia de esta aprobación: “Es una demostración más de la opcionalidad del crecimiento subterráneo en Tropicana”. La capacidad de la mina para reemplazar constantemente las reservas subterráneas con niveles que superan el agotamiento subraya la viabilidad del proyecto. Beyer también enfatizó cómo el desarrollo de La Habana es un indicativo del potencial positivo que la minería subterránea puede aportar al valor total de Tropicana.
El potencial de profundidad del yacimiento sugiere que, con exploraciones adicionales, la vida útil de La Habana podría ampliarse, aumentando significativamente su valor. A medida que el proyecto avanza, el mineral extraído será procesado en la planta Tropicana, que tiene una capacidad impresionante de aproximadamente 9,4 millones de toneladas anuales. Con este desarrollo en marcha, Tropicana no solo fortalecerá su producción, sino que también abrirá las puertas a un futuro donde la minería subterránea se establece como un pilar fundamental en la explotación de recursos naturales en Australia.