De acuerdo a un informe realizado por la consultora BNAmericas, Argentina es el país con las mejores posibilidades para crecer en el futuro dentro de la industria del litio.
La llegada de la pandemia de coronavirus produjo grandes caídas económicas a nivel mundial, donde el sector minero del “oro blanco” no quedó exceptuado.
Sin embargo, los datos de la empresa remarcan que “las perspectivas de crecimiento de la demanda sugieren que la actividad solo se ha retrasado y no descarrilado”, destacando a la nación como un actor “clave” en este contexto.
Hasta el momento, con el objetivo de impulsar el crecimiento de las exportaciones mineras, el Gobierno argentino sumó 15 proyectos de salmueras de litio.
Según el documento, el país cuenta con el proyecto de la industria del litio más avanzado de la región. Se trata de Caucharí-Olaroz, ubicado en el departamento Susques, en la provincia de Jujuy, perteneciente a las compañías Lithium Americas y a Ganfeng Lithium.
La obra, estimada para iniciar sus operaciones en 2022, cuenta con un gasto de capital de 565 millones de dólares y se espera que produzca 40.000 toneladas al año de carbonato de litio, duplicando la producción actual de la nación de 30.500 toneladas.
Asimismo, en el informe expresaron que “otro factor a favor de Argentina” es el apoyo de las autoridades de las provincias de Jujuy, Salta y Catamarca a los inversionistas, debido a que “facilitaron los procedimientos para los requisitos ambientales y legales”. En tanto, la consultora destacó que el impuesto fijo para los productores de litio es del 3%.
Finalmente, según la firma estadounidense DCDB Group, en los próximos 35 años el mercado mundial del elemento debiera crecer un 500%, pero expresaron que “la falta de financiamiento para nuevos proyectos y crecimiento en operaciones existentes conducirá a una menor oferta entre 2023 y 2025”.