Descubre cómo la Argentina lidera la transición hacia una economía sostenible a través del cobre
En un escenario definido por la urgencia de la descarbonización industrial y la creciente demanda de minerales críticos para la era digital, el cobre emerge como el héroe silencioso detrás de la revolución energética. La Argentina, comprometida con su papel como proveedor confiable en la cadena global de suministro, se perfila como un actor clave en el escenario mundial. La combinación de conductividad electrónica, durabilidad y resistencia a la corrosión hacen del cobre un elemento insustituible en la transición hacia una economía libre de emisiones.
En un contexto donde la escasez de cobre proyecta sombras hacia el horizonte 2040, la Argentina se postula como un jugador destacado en el tablero mundial de la producción cuprífera. Con una serie de proyectos en distintas provincias del país, incluyendo San Juan, Salta, Catamarca y Mendoza, se estima que la Argentina podría posicionarse entre los 10 principales productores de cobre a nivel global, con una producción anual cercana al millón de toneladas. La presencia de megaproyectos como Josemaría, Los Azules, El Pachón y Taca Taca señalan un futuro prometedor para la industria del cobre en el país.
Desde la Expo San Juan Minera hasta la conformación de la Mesa del Cobre, los gobernadores de Salta, Catamarca, San Juan y Mendoza se unen en un esfuerzo conjunto para potenciar la industria cuprífera argentina. Con inversiones proyectadas por encima de los USD 20.000 millones y exportaciones anuales adicionales que podrían ascender a los US$9.000 millones, la Mesa del Cobre promete catalizar un cambio trascendental en el panorama económico del país. Con una mirada puesta en la sostenibilidad y la innovación, la Argentina se prepara para liderar la revolución del cobre y contribuir significativamente a la transición hacia un futuro más verde y próspero.