La mina San Cristóbal de Bolivia, un enorme depósito de zinc, plomo y plata, suspendió sus operaciones por segunda vez debido al brote de coronavirus, dijo el lunes, mientras las infecciones por covid-19 continuaban propagándose en la nación sudamericana sin salida al mar.
La compañía, una subsidiaria de propiedad total de Sumitomo Corp de Japón, había suspendido sus operaciones anteriormente en marzo, antes de reanudar la producción en mayo.
San Cristóbal SA, la mina más grande de Bolivia, dijo que había suspendido por un tiempo sus operaciones debido a un brote de covid-19 en su campamento, ubicado en el departamento de Potosí.
“Minera San Cristóbal determinó priorizar la vida y rediseñar el sistema de trabajo para reiniciar las operaciones en condiciones seguras sin poner en riesgo a ninguno de los más de 1.400 trabajadores, empresas contratistas y habitantes del municipio Colcha K (en Potosí)”, dijo en un declaración.
Asimismo, la empresa subsidiaria de Japón agregó que había realizado 8.093 controles médicos a sus trabajadores y contratistas, lo que le permitió identificar 168 casos sospechosos, de los cuales 41 han sido confirmados.
El país boliviano tiene poco más de 109.000 casos confirmados de covid-19 y alrededor de 4.500 muertes hasta la fecha.