Evitando represalias, Brasil busca negociar aranceles con EE.UU.
Brasil ha optado por la vía del diálogo en lugar de represalias inmediatas ante los aranceles impuestos por Estados Unidos a las importaciones de acero y aluminio. El ministro de Hacienda, Fernando Haddad, anunció que el país buscará negociar con el gobierno estadounidense, siguiendo las indicaciones del presidente Lula da Silva. Esta decisión se toma a pesar de que Brasil es uno de los mayores proveedores de acero a EE.UU., y de las sugerencias iniciales de presentar una queja ante la Organización Mundial del Comercio.
La decisión de Brasil refleja una estrategia de mantener la calma y buscar soluciones a través del diálogo, recordando experiencias pasadas de negociaciones exitosas en condiciones menos favorables. El vicepresidente Geraldo Alckmin ha mantenido conversaciones con el secretario de Comercio de EE.UU., Howard Lutnick, estableciendo un canal de comunicación para abordar la política arancelaria. Este enfoque busca evitar una escalada en las tensiones comerciales y proteger los intereses de la industria siderúrgica brasileña.
La postura de Brasil contrasta con las rápidas represalias tomadas por Canadá y Europa ante los aranceles de EE.UU. La elección de Brasil de priorizar el diálogo y la negociación subraya su interés en mantener una relación comercial estable con Estados Unidos, mientras busca proteger su industria siderúrgica.