Petrobras está marcando un paso decisivo hacia la expansión de su capacidad de perforación con la reciente firma de contratos por un impresionante total de US$ 1.027 millones con la empresa Constellation. Estos contratos involucran la adquisición de dos buques sonda de altas especificaciones, que operarán en el rico yacimiento de Roncador, localizado en la cuenca de Campos. A partir de 2025, estas sofisticadas unidades, Laguna Star y Tidal Action, comenzarán sus operaciones en aguas que alcanzan profundidades entre 1.200 y 2.000 metros, lo que refleja el compromiso de Petrobras con la vanguardia tecnológica en la explotación de recursos submarinos.
El enfoque de Petrobras no solo se centra en la innovación, sino también en el impacto local. Los contratos incluyen un compromiso mínimo del 30% de contenido local, lo que significa que una porción significativa de los recursos y servicios necesarios será provista por empresas nacionales. Esto generará una oportunidad invaluable para el desarrollo de la industria local y la creación de empleo en la región. Los contratos prevén la creación de 250 empleos directos e indirectos para el buque Tidal Action y la preservación de otros 250 en el Laguna Star, reforzando así el tejido económico de la comunidad.
Los buques contratados están equipados con tecnología de punta, diseñados para realizar una variada gama de servicios que incluyen perforación, terminación e intervención de pozos submarinos. Además, están preparados para responder ante emergencias, incorporando vehículos operados remotamente (ROV) que permiten explorar y operar en entornos desafiantes y a gran profundidad. Esta capacidad operativa no solo optimiza la producción, sino que también asegura un enfoque seguro y eficiente en el manejo de recursos críticos.
El campo Roncador representa no solo una importante fuente de ingresos para Petrobras, sino también una asociación estratégica con Equinor, donde Petrobras mantiene una participación mayoritaria del 75%. Esta colaboración destaca la importancia del campo en la estrategia de crecimiento sostenible de la compañía, que busca maximizar su producción mientras invierte en el desarrollo tecnológico y en el bienestar de las comunidades locales. Con estas iniciativas, Petrobras se posiciona no solo como un líder en la extracción de hidrocarburos, sino también como un impulsor clave del desarrollo económico en Brasil.