Un Paso Hacia la Sostenibilidad Energética con Biodiesel de Segunda Generación
Petrobras marca un hito en la industria energética brasileña al lanzar al mercado un búnker con un 24% de biodiesel de segunda generación, proveniente de residuos agroindustriales. Esta semana, la compañía presentó el combustible marino VLS B24, diseñado para abastecer a los barcos en la costa brasileña y, con ello, se convierte en la primera empresa del país en ofrecer un producto que no solo cumple con los estándares de calidad, sino que también promueve la sostenibilidad. Este avance representa un paso significativo hacia un futuro más verde en la navegación marítima.
La estrategia de Petrobras no solo se centra en la rentabilidad, sino también en el desarrollo de productos con una menor huella de carbono. El VLS B24 es el resultado de un meticuloso proceso de mezcla entre combustible mineral y biodiesel, realizado en instalaciones específicas. Este búnker, además, cumple con los más altos estándares de certificación, como la ISCC EU RED, asegurando que el biodiesel utilizado es sostenible. Esta iniciativa es un reflejo de cómo la compañía busca posicionarse en un mercado en transformación, donde los productos sostenibles son cada vez más demandados.
Detrás de este significativo avance hay un compromiso firme hacia la investigación y el desarrollo. El director de Logística, Comercialización y Mercados de Petrobras, Claudio Schlosser, subrayó que la empresa está comprometida en conciliar su enfoque en el petróleo y el gas con la diversificación hacia negocios bajos en carbono. Pruebas de campo han demostrado que el funcionamiento de los motores y sistemas de tratamiento de combustible no se ve afectado, confirmando así la viabilidad operativa y comercial de esta nueva oferta. Este desarrollo no solo es una victoria para Petrobras, sino también para la industria marítima brasileña.
Con iniciativas como el VLS B24, Petrobras no solo se posiciona como líder en el sector energético, sino que también se convierte en un modelo a seguir en la transición hacia una economía más sostenible. “Las inversiones en productos que generen rentabilidad y beneficios ambientales son fundamentales para Petrobras”, afirmó Schlosser, reafirmando su compromiso con un futuro donde la energía limpa y eficiente sea una realidad, y no solo un ideal. Este enfoque visionario es clave para afrontar los desafíos del cambio climático y las exigencias del mercado actual.