Chuquicamata ha estado trabajando internamente en la definición de su mapa estratégico 2020-2024 durante los últimos meses, actividad que ha congregado de forma participativa a distintos integrantes de la división de Codelco, que atraviesa la transición de pasar de rajo abierto a mina subterránea.
Según la cuprera dentro de los compromisos inmediatos está el cumplimiento de las metas base para 2020, las que a ajustan a la realidad actual de su negocio y los desafíos corporativos de la transformación.
Así lo explicó el gerente de Administración de la División, Pablo Gelsse, quien expresó que “nuestra organización ya tiene conciencia que no somos la misma operación de hace años y que nuestra capacidad de producción es más baja; un poco más de la mitad de lo que producíamos en 2017, cuando superábamos al 600 mil toneladas de cobre fino al año”.
Fuente: El Mercurio de Calama