Codelco, el gigante estatal chileno del cobre, se prepara para un ambicioso plan de inversión de US$ 6.000 millones en 2025, un incremento de US$ 1.000 millones respecto a sus estimaciones previas. Este anuncio, realizado por el presidente del directorio, Máximo Pacheco, ilumina el futuro de la minería en Chile, donde Codelco juega un papel crucial al representar más del 25% de la producción del país. La inversión se destinará principalmente a la modernización de grandes operaciones mineras, incluyendo las icónicas Chuquicamata y El Teniente, el depósito subterráneo de cobre más grande del planeta.
Este año, Codelco planea gastar aproximadamente US$ 4.700 millones en una serie de proyectos destinados a revitalizar sus minas. Sin embargo, la empresa ha enfrentado años de retrasos provocados por sobrecostos millonarios, accidentes y problemas operativos que han obstaculizado el progreso en la producción. A pesar de los desafíos, las proyecciones de Codelco apuntan a que la inyección de capital será decisiva para reactivar el potencial productivo de estas minas y asegurar un futuro sostenible para la compañía.
La aprobación final para el gasto de capital en 2025 se discutirá en diciembre, y Pacheco ha admitido que la empresa tendrá que aumentar su deuda para financiar esta importante iniciativa. “El dinero que estamos inyectando como gasto de capital es muy atractivo en términos económicos”, comentó, subrayando la importancia de este gasto para el desarrollo continuo de la minería chilena y la economía nacional en general.
En una reciente movida estratégica, Codelco adquirió el 10% de participación de Enami en la mina Quebrada Blanca de Teck por US$ 520 millones, lo que refuerza su compromiso con la expansión y diversificación de sus operaciones. Con estas inversiones y proyectos en marcha, Codelco no solo busca mejorar su capacidad operativa, sino también consolidar su posición como líder global en la producción de cobre y contribuir significativamente a las finanzas de Chile en el futuro cercano.