La Empresa Nacional de Minería (Enami) de Chile, en colaboración con JRI Ingeniería, avanza en un proyecto innovador que busca recuperar tierras raras desde los relaves del depósito Punta Morado, ubicado en la comuna de Taltal. Esta iniciativa se ha convertido en un faro de esperanza para la minería chilena, ya que las tierras raras son esenciales para la transición energética y la electromovilidad. A medida que las naciones buscan medios sostenibles para satisfacer la creciente demanda de estas tecnologías, la recuperación de estos materiales altamente valiosos desde relaves representa una oportunidad sin precedentes.
El inicio oficial de este proyecto fue formalizado mediante la firma de un convenio entre las dos entidades. Este compromiso fue respaldado por destacadas figuras de Enami, como el Vicepresidente Ejecutivo Iván Mlynarz, y el gerente general de JRI, Iván Rayo, quienes resaltaron la importancia de esta colaboración. Mlynarz enfatizó que el proyecto no solo se enfoca en generar beneficios económicos, sino que también es crucial desde una perspectiva tecnológica y medioambiental, buscando generar un impacto positivo en la minería del país y en su entorno.
La recuperación de tierras raras no es una tarea sencilla y requiere un plan meticuloso que consta de varias etapas. La primera fase incluye la caracterización química y mineralógica de los relaves, lo que permitirá una evaluación preliminar del potencial económico del depósito. Posteriormente, se diseñará e implementará una planta piloto modular, donde se llevará a cabo la validación del proceso en un entorno operativo real. Esta hoja de ruta no solo orienta el proyecto hacia la rentabilidad, sino que también establece la base para un futuro de producción a escala industrial.
El potencial de este proyecto es significativo. Con la creciente demanda de metales críticos debido a tendencias globales hacia tecnologías más limpias, el trabajo conjunto entre Enami y JRI no solo promete revitalizar el uso de relaves mineros, sino que también podría marcar un cambio de paradigma en la industria. A través de este esfuerzo, Chile podría posicionarse como un líder no solo en la producción de minerales, sino también en la recuperación sostenible de recursos estratégicos, contribuyendo a un futuro más verde y eficiente para todos.