El futuro sigue luciendo prometedor para el cobre, de acuerdo con Francisco Blanch, jefe global de commodities de Bank of America. Aunque anticipa que el comienzo de la superación de la pandemia llevará a una recuperación de la oferta del metal rojo, asegura que el impulso que recibirá la demanda será inigualable, con el resto del mundo sumándose a la reactivación que ya se experimenta en China.
¿La tendencia al alza observada en el cobre se va a extender durante 2021?
-En principio sí. Pensamos que el mercado va a seguir fuerte por el lado de la demanda, ya que la recuperación económica se ha ampliado a más países. Tenemos un escenario en el que habrá más oferta, pero la demanda de cobre sólo se va a seguir ampliando. Entonces el mercado va a estar en déficit y los inventarios irán cayendo.
¿Qué fuerzas están empujando el escenario que describe?
-La pandemia tuvo un impacto muy fuerte, explotó un colapso de la demanda y de la oferta, por el daño que se mantuvo en la capacidad productiva. Esas tendencias son las que se han comenzado a revertir. Se han recibido unos vientos de cola muy fuerte.
La oferta minera de cobre está prácticamente igual que en 2017 y esto quiere decir que al final, lo que vamos a tener es un mercado bastante ajustado, mientras que la demanda sigue subiendo. Aunque vamos a ver un rebote en la oferta, el aumento del consumo va a seguir superando esa.
¿Distingue algún riesgo?
-Más allá de la oferta de cobre, va a haber un aumento importante del cobre reciclado. Vamos a pasar de 4,2 millones de toneladas en 2020 a 5,3 millones en 2021. Pero lo más relevante será que la demanda seguirá subiendo muy rápido.
La demanda en China, pese a que el gobierno ya está reduciendo un poco el estímulo fiscal, este sigue muy fuerte y prácticamente todos los sectores económicos de China están apoyando el consumo de cobre. No se trata de uno solo de sus sectores.
En tanto, a nivel mas global estamos viendo cada vez mas paises que se recuperan. Es una ampliación de la base de desmanda, que reducirá los inventarios en el primer trimestre.
¿Las tendencias que favorecerán el valor del cobre en 2021 son circunstanciales o estructurales?
-El cobre viene con cierto impulso de entrada. En 2020 hemos tenido varios factores clave. Uno de ellos es que se ha advertido la masa monetaria, también que ha habido un estímulo fiscal muy fuerte a nivel global y luego, sobre todo, está el shock de demanda, con la caída del PIB, que ha sido sobre todo en el sector servicios.
Lo que vimos es que durante el confinamiento la gente que tenía dinero y seguía trabajo comprando, mientras que los gobiernos seguían invirtiendo en infraestructura. Entonces, lo que hemos visto es que en comparación a la recesión de 2008 y 2008, el colapso en la demanda de bienes es la la mitad y el estímulo ha sido el doble.
En tanto, la oferta vino muy golpeada tanto en Perú como en Chile, donde hubo un crecimiento de penas. De hecho, el recorte de inversión de capital no se ha revertido todavía, como sí lo ha hecho la demanda, con este consumo de bienes que ha continuado. Es una situación bastante única, porque la gente siguió comprando en el comercio electrónico y eso sigue apoyando al cobre.
¿Cómo luce el 2021 para el valor del petróleo?
-Su situación es diferente a la del cobre, porque el petróleo está en el centro del huracán Covid, debido a que esta es una crisis de movilidad y actualmente seguimos con restricciones de viaje, de tráfico aéreo. Entonces, vemos una recuperación muy extraña.
El diesel se ha recuperado en forma de “V”; pero la de gasolina, en “W”, debido a una serie de nuevos confinamientos, mientras que la demanda de fuel sigue con una forma de “L”; no se ha recuperado. Vemos un pequeño rebote, pero muchas aerolíneas siguen sin funcionar o con poco tráfico de pasajeros.
¿Qué efecto tendrá la vacuna en este mercado?
-Ha apoyado mucho el alza de los precios en las últimas semanas y esperamos que esa tendencia continúe por un tiempo, pero no va a generar un incremento muy fuerte. Los inventarios de petróleo están muy altos y, por otro lado, la OPEP tiene una excelente capacidad productiva y así como recortó 10 millones de barriles al día, todavía tiene 7,7 millones y sorprendido recientemente sumar medio millón a partir de enero.
Lo que sí anticipamos es que la demanda de petróleo se va a recuperar un poco en el segundo trimestre, cuando la vacuna ya esté distribuida y haya un aumento importante de los vuelos internacionales. Hasta eso momento no veremos mucha fuerza en la demanda.
¿Qué proyecciones de precios manejan para 2021?
-Manejamos un precio promedio de US$50 para el Brent y US$44 para el WTI, aunque para el 2T tenemos un precio objetivo de US$60. En tanto, para el cobre esperamos un promedio para 2021 de US$3,44 la libra.
Fuente: Pulso