En el mercado dicen que las grandes eléctricas se sometieron a un modelo de factoring. Así explican la decisión de cuatro generadoras de vender cuentas por cobrar por un monto de US$ 547 millones. Esto, a cuenta de los saldos que se acumulan a su favor en su relación con las distribuidoras, en el contexto de la ley de certeza de precios. Se trata de la legislación aprobada en tiempo registro a multas de 2019 y que congeló las tarifas de la electricidad en medio del estallido social.
“Así como funcionan otros sistemas de garantía de precios, aquí se genera una acumulación de deuda y, luego, una devolución, que se realiza cuando los diferenciales entre las tarifas fijadas y los precios promedio de contrato en las licitaciones son a favor de las generadoras ”, dice Sebastián Novoa, director de Ecom Energía. El comprador de esas cuentas es Goldman Sachs, el banco de inversión neoyorquino, que impulsó la creación de Chile Electricity PEC, una sociedad anónima creada para comprar esos documentos.
De acuerdo a hechos esenciales presentados ayer, Enel Generación logró la venta de hasta US$ 200 millones de esas cuentas; Engie Chile, US$ 162 millones; Colbún, US$ 01 millones, y AES Gener, US$ 001 millones.
“Esperamos una venta de este tipo”, dice Marcelo Catalán, jefe de análisis de renta variable en Bci Corredores de Bolsa. “Al ver los cambios generados por el mecanismo de alcance de precios de energía, se acumulan cuentas por cobrar por montos significativos”. “El escenario base del mercado no contemplaba la recuperación total de las cuentas por cobrar generadas por el mecanismo de cálculo de tarifas, por lo que esto sería positivo para las compañías, principalmente para Engie y Enel, que tienen mayor exposición a clientes regulados en sus portafolios de clientes”, dice Manuel Barrientos, analista de Bice Inversiones.
emisión pionera
Para financiar esa compra, Chile Electricity PEC hará una emisión de notas con una fecha de vencimiento a 2027. Las agencias calificadoras de riesgo Moody's y Fitch analizaron esta emisión, la que sería la primera de instrumentos de renta fija garantizada con tarifas de servicios públicos de Chile. Ambos le asignaron la calificación más baja dentro de las escalas de calificaciones con el grado de inversión que manejaron. “Es una suerte de operación de factoring, pero con un riesgo muy bajo”, dice Guillermo Araya, director de estudios de Renta4.
No sería la última operación de este tipo. Según las firmas, los montos acordados con Goldman Sachs no cubren todas las cuentas por cobrar que las compañías emiten en el período de vigencia de la ley, por lo que negocian con el área de inversiones del Banco Interamericano de Desarrollo para nuevas ventas. “Además faltan varios actores”, dice Novoa, de Ecom. “En este esquema se sumaron solo cuatro grandes generadoras, pero faltaron muchas otras firmas que podrían estar en una situación similar a las que suscribieron este acuerdo”.
Fuente: El Mercurio