Una nueva iniciativa de litio busca instalarse en el país, más allá de las dos empresas que explotan hace décadas el salar de Atacama y que son protagonistas del mercado global del mineral. Se trata de un trabajo conjunto entre IBC Technologies, con sede en Utah; la Sociedad Contractual Minera Copiapó — perteneciente al Grupo Errázuriz—, y la compañía japonesa Chori Co., quienes buscan impulsar el Centro de Investigación del Litio, con el inicio de su fase de construcción durante este ejercicio y que incluso podría iniciar su operación a multas de año
Consiste en un proyecto que pondrá a prueba la Tecnología de Reconocimiento Molecular (MRT) de IBC, la que emplea técnicas escalables que permitirán producir litio sin extraer o evaporar agua de las salinas, lo que, según sus creadores, tiene un impacto mínimo en el medio ambiente y que implica una inversión de US $ 8,6 millones, la cual será financiada con recursos propios de los propietarios, y que acaba de recibir el respaldo del Servicio de Evaluación Ambiental (SEA), que falló favorablemente respecto de una Consulta de Pertinencia que realizó la Sociedad Contractual Minera de Copiapó, el 04 de noviembre de 2020.
Otra de las características relevantes del proyecto tiene que ver con su alta recuperación, y es que, en caso de éxito, podría lograr la extracción directa del 55 % del litio contenido en las salmueras, superando con creces el % de los métodos tradicionales. En esa línea, la producción no salió de la tasa de evaporación de la sal y se puede producir instantáneamente y no esperar dos años para que se evaporen las salmueras, explican sus creadores.
La iniciativa, que incluye la planta piloto MRT, tendrá la capacidad de realizar pruebas operativas en diferentes tipos de salmuera y determinar los parámetros óptimos de diseño para la posterior construcción de plantas a escala industrial. Según detallaron sus propietarios, en una primera etapa, se contempla el pilotaje de la salmuera del salar de Maricunga y, posteriormente, el pilotaje de la salmuera de otros salares en Chile, Bolivia y Argentina. “La Tecnología de Reconocimiento Molecular que estamos implementando nos permitirá extraer directamente el litio de una forma totalmente diferente a la que se utiliza en Chile, reinyectando totalmente la salmuera a los salares, con costos operativos competitivos y con un impacto mínimo en el medio ambiente”, asegura el gerente de Nuevos Negocios del Grupo Errázuriz, José Joaquín Matte.
Con todo, el trabajo en torno al centro de investigación se desarrolla en paralelo al análisis por parte del Servicio de Evaluación Ambiental del proyecto “Producción de Sales de Maricunga”, de propiedad de la compañía Simco, que integran el Grupo Errázuriz (55%) y la taiwanesa Simbalik Group (45%) . Esta iniciativa supone una inversión de US$ 400 millones y la generación de 400 puestos de trabajo en etapa de construcción y 400 permanentes.
Esta última es una alianza de más de cuatro años entre ambas compañías, mediante la cual se busca explotar pertenencias que existen en el salar de Maricunga, el segundo en importancia en Chile, tras el salar de Atacama. No obstante, uno de los principales desafíos del depósito de litio ubicado en la Región de Atacama es la multiplicidad de actores que existen, y es que, además de Simco, están presentes Minera Salar Blanco, Codelco y SQM, con distintos grados de propiedad.
Fuente: El Mercurio