Por primera vez en su accidentada historia, el proyecto minero Pascua-Lama de la canadiense Barrick, que está paralizado desde 2013, se anotó un triunfo en la Corte Suprema.
Esto, porque el lunes 6 de enero, la Tercera Sala del máximo tribunal del país rechazó una casación de fondo y forma en contra la decisión del Segundo Tribunal Ambiental que respaldó a su vez una revisión que se hizo entre 2013 y 2016 del permiso ambiental de la iniciativa.
En ese entonces, Compañía Minera Nevada –titular del desarrollo minero binacional- abrió un proceso de revisión de su Resolución de Calificación Ambiental (RCA), que buscaba determinar si efectivamente la variable ambiental relativa a la línea de base de calidad de aguas del Río Estrecho ha variado sustantivamente. Esto había surgido por orden de la Corte de Apelaciones de Copiapó cuando paralizó la construcción, tras una presentación de una serie de comunidades indígenas.
Tras el proceso de revisión de la RCA, se confirmó una variación en la calidad de las aguas superficiales del río, por causas no atribuibles al proyecto, lo que permitió adaptar la línea base de acuerdo a los nuevos valores observados, lo que se sumó al permiso ambiental.
Así, la comunidad indígena Patay Co intentó por la vía administrativa oponerse a esta situación y, luego, vía judicial a través del recurso de ilegalidad en el Tribunal Ambiental, dado que a su entender el proceso de revisión no cumplió la legislación. Esa instancia no acogió el reclamo, el que llegó a la Suprema, donde se volvió a pedir que se mantuvieran los valores de la línea base previos al proceso de revisión.
Así, la Tercera Sala emitió un fallo de 54 páginas, donde la empresa –que fue representada por Rafael Vergara, Aldo Molinari y Tomás Darricades de Carey- logró validar su posición.
Esto, además, tiene la importancia que la empresa canadiense logra proteger uno de sus activos más importantes: el permiso ambiental original, lo que además podría incidir favorablemente en los procedimientos sancionatorios por la clausura definitiva de proyecto que se encuentran pendientes de fallo ante el Tribunal Ambiental de Antofagasta, explican conocedores del caso.
Al momento de ser detenido, Pascua-Lama tenía un avance cercano al 40%. Solo se alcanzó a remover el 1% del material estéril del lugar donde estaría el rajo en el que se extraería oro y cobre.
Fuente: Diario Financiero