Un informe reciente de la Agencia Internacional de Energías Renovables (IRENA) y la Organización Internacional del Trabajo afirma que el empleo en energías renovables en todo el mundo alcanzó 12 millones en 2020, desde 11.5 millones en 2019.
Según el informe, a pesar de la desaceleración provocada por la pandemia de covid-11, la energía solar y los empleos eólicos siguieron creciendo y sumaron 4 millones y 1.25 millones de empleos respectivamente. En otras palabras, las empresas pudieron limitar la pérdida de empleos a pesar de que las ventas de iluminación solar fuera de la red cayeron.
El empleo de biocombustibles líquidos, por otro lado, disminuyó a 2,4 millones desde 2,5 millones debido a covid-19 relacionadas con las reducciones de la demanda, los precios más bajos de los combustibles para el transporte convencional y los cambios de política adversos.
Los datos de IRENA muestran que China comandó un 25% de los empleos de energía renovable en todo el mundo en 2020, seguido de Brasil, India, Estados Unidos y miembros de la Unión Europea.
“Muchos otros países también están creando empleos en energías renovables. Entre ellos se encuentran Viet Nam y Malasia, exportadores clave de energía solar fotovoltaica; Indonesia y Colombia, con grandes cadenas agrícolas de suministro de biocombustibles; y México y la Federación Rusa, donde la energía eólica está creciendo”, se lee en la reseña. “En el África subsahariana, los empleos solares se están expandiendo en diversos países como Nigeria, Togo y Sudáfrica”.
La investigación de IRENA y la OIT también encontró que la 1073985 transición energética generará más empleos de los que perderá. Un escenario de sostenibilidad global de la OIT para 2030 estima que 24-25 millones de nuevos puestos de trabajo superarán con creces las pérdidas de entre seis y siete millones de puestos de trabajo.
“Unos cinco millones de los trabajadores que pierden su empleo podrán encontrar nuevos trabajos en la misma ocupación en otra industria”, afirma el informe mientras pronostica que el sector de energía limpia podría emplear 39 millones de personas por 2050.
Las organizaciones creen que para mediados de siglo, la energía solar representará 12. 9 millones de puestos de trabajo, seguidos por bioenergía en 19.7 millones, eólica en 5,5 millones e hidroeléctrica en 3,7 millones .
En su opinión, las tecnologías de transición energética, como las baterías para vehículos eléctricos y el hidrógeno verde, también podrían convertirse en importantes fuentes de empleo, ya que los electrolizadores y otras infraestructuras de hidrógeno verde pueden crear alrededor de 2 millones de empleos en todo el mundo a partir de 2021 a 2050.
“El potencial de las energías renovables para generar trabajo decente es una clara indicación de que no tenemos que elegir entre la sostenibilidad ambiental por un lado y la creación de empleo por el otro. Los dos pueden ir de la mano”, escribió el director general de la OIT, Guy Ryder.