El cobre tocaba el viernes un pico de más de dos años, ya que los especuladores extendían su ola de compras apostando a la recuperación del mayor consumidor mundial de metales, China, en medio de la debilidad del dólar.
El cobre referencial en la Bolsa de Metales de Londres (LME) tocó los 6.850 dólares la tonelada, su cota más elevada desde junio de 2018, antes de recortar ganancias y sumar un 0,5% a 6.812 dólares a las 1020 GMT.
El cobre ha trepado un 55% desde que cayó a mínimos de 45 meses en marzo.
“La fortaleza del mercado que estamos viendo ahora es fenomenal. La historia está centrada en China y el impulso general que está viviendo el complejo de las materias primas”, dijo Ole Hansen, de Saxo Bank en Copenhague.
“Mientras sigamos por encima de la tendencia alcista clave, que hoy está en 6.700 dólares, no hay razón para que los especuladores, que han acumulado una posición larga bastante grande en el cobre, hagan ajustes”, agregó.
El índice dólar, que compara al billete verde con seis destacadas monedas, bajaba tras un decepcionante dato de empleo en Estados Unidos que ensombreció el panorama económico, abaratando la compra de metales con otras divisas.
En otros metales básicos, el aluminio en la LME ganaba un 0,5%, a 1.789,50 dólares la tonelada; el zinc subía un 0,8%, a 2.533,50 dólares; el plomo mejoraba un 0,4%, a 1.917,50 dólares; el níquel cedía un 0,3%, a 15.040 dólares; y el estaño perdía un 0,1%, a 18.180 dólares.