Los precios del cobre tocaron brevemente el martes su nivel más alto desde 2012, extendiendo una racha alcista impulsada por el optimismo sobre la demanda china y la recuperación económica mundial, antes de retroceder en una sesión con escaso volumen de operaciones.
A las 1050 GMT, el cobre a tres meses en la Bolsa de Metales de Londres (LME) sumaba un 0,3% a 8.416,50 dólares la tonelada luego de subir más temprano a 8.437 máximo desde mayo de 2012.
El martes es la tercera sesión consecutiva en la que el cobre de la LME alcanza nuevos máximos de varios años, habiendo subido un 93% desde marzo del año pasado.
El volumen de operaciones era bajo, ya que los mercados de China continental están cerrados por el feriado del Año Nuevo Lunar hasta el miércoles.
Algunos inversores ven los altos precios actuales como el comienzo de un nuevo mercado alcista, pero el analista Carsten Menke de Julius Baer en Zúrich es cauteloso. “No nos subiremos a ese tren superciclo, que parece que ya salió de la estación”, declaró.
Una justificación del último aumento de precios es que las restricciones de cierre en China significan que muchas personas no viajan y las fábricas están ocupadas.
El alza de los precios de los metales era apoyado por un dólar más débil, que tocó un mínimo de tres semanas, abaratando las materias primas para los tenedores de otras monedas.
Para el año calendario 2021, se espera que la demanda china sea aproximadamente un 5% más alta que en 2019, pero en Perú y Chile, los dos mayores exportadores de cobre primario del mundo, se mantienen las restricciones de suministro, declaró BHP.