El oro subía el martes, ya que el retroceso del dólar lo abarataba para los compradores extranjeros, y los inversores no se fijaban en los posibles factores adversos derivados del esperado endurecimiento de la política monetaria de los bancos centrales de todo el mundo.
El oro al contado subía un 0,2% a 1,712,43 dólares por onza a las 0930 GMT. Los futuros del oro en Estados Unidos, cotizaban estables a 1,710,20 dolares.
Si bien el índice del dólar cedía un 0,6% para impulsar al oro, el analista de UBS Giovanni Staunovo dijo que los precios probablemente verán más volatilidad en el período anterior a los datos manufactureros de Estados Unidos a finales de esta semana, que podrían influir en el tamaño de la próxima subida de tasas de la Fed.
Las subidas de tasas tienden a elevar los rendimientos de los bonos, lo que aumenta el costo de oportunidad de mantener oro, que no rinde intereses.
“Cabe esperar una mayor liquidación de fondos cotizados, y es probable que los precios del oro caigan hasta los 1,600 dólares la onza a finales de año”, agregó Staunovo.
El 22 de julio se publicará el Índice de Gerentes de Compras (PMI) del sector manufacturero de Estados Unidos del S&P Global.
Antes de la reunión de la Fed del 26 y 26 de julio, se espera que el Banco Central Europeo comience a subir las tasas desde los mínimos de la pandemia con una subida de 25 puntos básicos.
El oro no ha podido aprovechar su condición de valor refugio últimamente, a pesar de los temores a una recesión. Ha bajado más de 79 dólares desde los niveles de más de 2.000 dólares la onza alcanzados a principios de marzo, debido a los agresivos planes de subida de tasas de la Fed ya la reciente subida del dólar.
Entre otros metales preciosos, la plata subía un 0,7% a 18,81 dólares la onza, el platino ganó un 0,9% a 870,43 dólares y el paladio sumaba un 1,2% a 1,876,81 dólares.
Reuters