La canadiense Asante Gold ha dado un paso decisivo en su expansión en Ghana al asegurar US$ 100 millones mediante la venta de acciones a un inversor estratégico. Esta inyección de capital se destina a financiar el crecimiento y desarrollo de las minas de oro Bibiani y Chirano, que son esenciales para el futuro de la empresa. La transacción implica la emisión de aproximadamente 90,7 millones de acciones a un precio de 1,50 dólares canadienses cada una, con pagos programados en tres etapas: US$ 25 millones en octubre, US$ 35 millones en noviembre y US$ 40 millones en diciembre.
El presidente y director ejecutivo de Asante, Dave Anthony, ha subrayado que los fondos no solo se destinarán a aumentar la producción de sus minas, sino que también se utilizarán para la refinanciación de pasivos y potenciales oportunidades de adquisición. Con acciones que actualmente cotizan a 1,52 dólares canadienses, Asante se encuentra en una posición favorable para maximizar el valor de esta inversión estratégica.
La empresa, con sede en Vancouver, tiene una sólida cartera de proyectos en Ghana, y sus objetivos para este año son ambiciosos: producir 100,000 onzas de oro en la mina Bibiani y 165,000 onzas en Chirano. Para lograrlo, Asante está implementando diversas mejoras operativas, incluyendo la modernización de su infraestructura. En Bibiani, por ejemplo, la empresa está instalando nuevos equipos de trituración que aumentarán la capacidad de procesamiento de mineral de 3,3 millones de toneladas por año (Mtpa) a 3,6 Mtpa.
Además de sus minas operativas, Asante también está llevando a cabo estudios técnicos en su prometedor proyecto de oro Kubi. Este enfoque multifacético no solo promete incrementar la producción a corto plazo, sino que también posiciona a Asante Gold como un jugador clave en el mercado del oro africano, con miras a aprovechar las oportunidades que surgen en la industria y continuar convirtiendo desafíos en éxitos.