Científicos de la Universidad Tecnológica de Nanyang en Singapur han desarrollado un dispositivo de bajo costo que puede aprovechar la energía del viento tan suave como una brisa ligera y almacenarla como electricidad.
Según los investigadores, cuando se expone a vientos con una velocidad tan baja como dos metros por segundo, el dispositivo puede producir un voltaje de tres voltios y generar energía eléctrica de hasta 290 microvatios, suficiente para alimentar un sensor comercial y también enviar los datos a un teléfono móvil o a un ordenador.
El dispositivo, llamado cosechador de viento, también desvía la electricidad que no está en uso a una batería, donde puede almacenarse para alimentar dispositivos en ausencia de viento.
Sus inventores creen que la nueva tecnología tiene el potencial de reemplazar las baterías en la alimentación de luces de diodos emisores de luz (LED) y sensores de monitoreo de salud estructural.
Con solo 15 centímetros por 20 centímetros, el dispositivo se puede montar fácilmente en los costados de los edificios y sería ideal para entornos urbanos.
“Como fuente de energía renovable y limpia, la generación de energía eólica ha atraído una gran atención de la investigación. Nuestra investigación tiene como objetivo abordar la falta de un recolector de energía a pequeña escala para funciones más específicas, como alimentar sensores y dispositivos electrónicos más pequeños”, dijo el investigador principal Yang Yaowen en un comunicado de prensa.
Desde el punto de vista de Yaowen, la cosechadora de viento también puede servir como una alternativa potencial a las más pequeñas baterías de iones de litioya que es autosuficiente, solo requeriría un mantenimiento ocasional y no utiliza metales pesados.
Dado que la innovación ha despertado el interés de la industria, el equipo de investigación de la NTU ahora está trabajando para comercializarla.