Científicos de la Universidad Estatal de Michigan descubrieron que Geobacter, una bacteria que se encuentra en el suelo y los sedimentos, es eficaz mineros de cobalto, ya que pueden extraer el metal del óxido sin dejar que penetre en sus células y los mate.
En un estudio publicado en la revista Frontiers in Microbiology, los investigadores explican que las Geobacter no solo sobreviven a la exposición al cobalto, sino que esencialmente se cubren con el metal.
Las Geobacter se cubren con cobalto, como Iron Man cuando se pone el traje
“Forman nanopartículas de cobalto en su superficie. Se metalizan solos y es como un escudo que los protege”, explica Gemma Reguera, autora principal del estudio. “Es como Iron Man cuando se pone el traje”.
El cobalto, en general, mata los microbios al penetrar en sus células y causar estragos.
Pero sabiendo por estudios anteriores que las Geobacter son extremadamente resistentes porque, por ejemplo, pueden impedir que los contaminantes de uranio lleguen a las aguas subterráneas, sospecharon que la capacidad de las bacterias para respirar el óxido también podría ayudarlas a sobrevivir a la exposición al cobalto.
Este descubrimiento se considera una prueba de concepto que abre la puerta a una serie de posibilidades, como el uso de Geobacter como base de la nueva biotecnología construida para
recuperar y reciclar cobalto de baterías de iones de litio .
Los pequeños organismos también podrían usarse para absorber otros metales tóxicos como el cadmio, que anteriormente se creía que eran sentencias de muerte para la bacteria.