¿Es posible desarrollar una industria de minería digital y moderna en Chile, con trabajadores expertos en el manejo de softwares de gestión y máquinas automatizadas? Para acercarnos a una realidad como la planteada, el primer paso es abordar la minería como un espacio de trabajo inteligente e interconectado.
Vanson Bourne, consultora especializada en tecnología, señala que el 70% de las 100 compañías mineras más grandes del mundo coincide en que la Internet de las Cosas (IoT) es el elemento que proporciona la ventaja competitiva necesaria para enfrentar los nuevos escenarios y contingencias.
La noción de una minería meramente extractiva quedó obsoleta, sobre todo por la necesidad actual de potenciar operaciones más seguras, sustentables y a menor costo frente a la extracción desde depósitos mineros más complejos, remotos o profundos.
La publicación “Assessment of the Effects of Global Digitalization Trends on Sustainability in Mining” del Instituto Federal de Geociencias y Recursos Naturales (RGB), agencia perteneciente al Ministerio Federal de Economía y Energía de Alemania, destacó que el sector minero todavía está en las primeras etapas para llegar al objetivo de una operación minera conectada digitalmente, impulsada por los datos, autónoma y sostenible.
Los avances han sido significativos, pero la minería sigue estando al debe en temas de digitalización en comparación con otras industrias, mientras que paralelamente la ciudadanía exige prácticas más sostenibles no mañana, sino hoy mismo.
Desde otra arista, la investigación evidenció además que las tendencias de digitalización no están progresando de manera uniforme en el mundo producto de condiciones geográficas, operativas y metodológicas, siendo hasta ahora principalmente las grandes empresas con presencia mundial quienes impulsan el proceso.
Lo cierto es que la demanda de materias primas desde países como China, Rusia, India y Brasil va en aumento. A la vez, estamos en plena descarbonización de la economía, lo que requiere disponer de metales (hasta el momento irreemplazables) para la confección de paneles solares, turbinas eólicas y vehículos eléctricos. Así, para avanzar en materia de sustentabilidad, es central que progrese también la minería.
Para implementar sistemas ciberfísicos y soluciones como la gestión de datos en la nube y la instalación de procesos de trabajo computarizados, hace falta más que solamente tener a disposición la tecnología ad hoc. En un encuentro de la red German Mining Network volvimos a discutir evidencia internacional como el estudio antes mencionado, dejando claro que la transformación digital de la minería dependerá, en gran medida, de nuestra capacidad para preparar a sus trabajadores.
Ya en 2019 el Consejo de Competencias Mineras (CCM), entidad dependiente del Consejo Minero, advertía que los mantenedores mecánicos y operadores de equipos móviles y fijos, y con conocimientos tecnológicos, son los perfiles más demandados por el sector. El CCM también estimaba que al 2028 la minería local habrá requerido alrededor de 25.000 nuevos trabajadores calificados.
La industria minera nacional e internacional está situada en un punto clave que exige la adopción de tecnologías atingentes a su liderazgo y proyección. La automatización, plataformas integradas, IoT, herramientas de simulación, control remoto desde centros de operación, trabajadores conectados y la ciberseguridad, son elementos prioritarios.
No obstante, su incorporación tiene que ir acompañada de procesos cognitivos y de trabajo en conjunto, fortaleciendo herramientas como el e-Learning, la formación dual y otros modelos innovadores de capacitación. Sin duda, el desarrollo de la minería en Chile y el mundo requiere reforzar el intercambio de buenas prácticas y experiencias de países que, como Alemania, observan al nuestro con interés. Esto, tanto para futuras inversiones como también para el levantamiento de proyectos colaborativos. Ahora, la meta es seguir trabajando desde la disrupción y convertibilidad digital para motivar a más actores de la minería, incluyendo las Pymes, a sumarse cuanto antes a este cambio de paradigma.
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