Descubre cómo la expansión de la minería ilegal amenaza los ingresos y la estabilidad en las zonas mineras, mientras el Estado lucha por la formalización
En un escenario marcado por la incertidumbre y la inquietud, la expansión de la minería ilegal en Perú ha desencadenado una serie de consecuencias devastadoras que ponen en riesgo no solo los ingresos por canon y las obras en zonas mineras, sino también la seguridad y el bienestar de las comunidades cercanas. La lucha contra esta lacra se vuelve cada vez más urgente y crucial para preservar la integridad de la industria minera.
A medida que los ataques en la mina Poderosa en La Libertad continúan y la preocupación entre los inversionistas crece, Guillermo Shinno, Gerente General Corporativo de Apumayo, advierte sobre el peligro latente que representa la actividad de mineros ilegales y bandas criminales en las concesiones mineras. La amenaza de apoderarse de estas concesiones pone en peligro los ingresos generados por la minería formal, perjudicando a las comunidades y a las regiones mineras en su conjunto.
Además de los impactos económicos, la minería ilegal desencadena una ola de criminalidad que afecta los puestos de trabajo formales, depreda el medio ambiente y genera cadenas de economía paralelas basadas en delitos como la trata de personas. A pesar de los esfuerzos del Estado por formalizar la actividad minera, las cifras revelan un desafío monumental: de los más de 200 mil mineros informales o ilegales en el país, solo una fracción está inscrita en el registro oficial, planteando un desafío significativo en la lucha contra la ilegalidad.
En este contexto, Shinno Huamaní, ex viceministro de minería, insta al gobierno a fortalecer su estrategia de formalización y a tomar medidas en contra de aquellos que operan al margen de la ley. Es crucial trabajar con los mineros artesanales que buscan formalizarse y aplicar la ley con firmeza para evitar que la minería ilegal continúe dañando la reputación y el funcionamiento de la industria minera formal, que busca contribuir al desarrollo sostenible de la sociedad. La batalla por la formalización y el control de la minería ilegal se presenta como un desafío crucial para el futuro de la minería en Perú.