El precio del oro tocó un nuevo récord máximo el lunes, ya que el temor al impacto económico por el aumento de casos de coronavirus mejoraba su atractivo como valor seguro, antes de bajar levemente por una apreciación del dólar que animaba a una cierta toma de beneficios.
A las 0952 GMT, el precio del oro al contado cedía un 0,2%, a 1.971,52 dólares la onza, tras tocar un pico histórico de 1.984,66 dólares durante las operaciones asiáticas. Los futuros del oro en Estados Unidos mejoraban un 0,1%, a 1.988 dólares.
“La corrección del dólar desde mínimos de dos años está restando algo de brillo al oro”, dijo el analista independiente Ross Norman. “Parece que estamos en un periodo de consolidación y hemos visto algunas tomas de beneficios”.
No obstante, el hito de los 2.000 dólares está dentro de las previsiones en el corto plazo, agregó Norman, gracias a una serie de factores como datos económicos más débiles y una reactivación de la tensión geopolítica entre Estados Unidos y China, que impulsan al alza al metal precioso.
El aumento de casos del COVID-19 y el pulso entre Pekín y Washington han reducido las esperanzas de una rápida recuperación económica, dirigiendo los flujos hacia activos seguros como el oro, que ha trepado casi un 30% en el año.
El lingote se veía presionado por un alza del 0,3% del índice dólar, que compara al billete verde con seis destacadas monedas. Esta situación encarece los activos tasados en dólares para los tenedores de otras divisas.
El oro al contado podría retroceder a un rango de entre 1.943 y 1.954 dólares la onza si no logra romper la resistencia de 1.982, según Wang Tao, analista técnico de Reuters.
En otros metales preciosos, la plata bajaba un 0,6%, a 24,22 dólares la onza; el platino subía un magro 0,1%, a 907,51 dólares; y el paladio ganaba un 1,1%, a 2.113,19 dólares.